En este artículo haremos un repaso de los tipos de implantes dentales que podemos encontrar en el mercado. Estos, constituyen una solución eficaz para sustituir una pieza dental (o varias) que hayamos podido perder. Incluso, tienen su solución, para aquellos pacientes que presentan poco hueso. El proceso suele hacerse en tres fases y tener una duración de unos tres meses, aunque esto depende de la pérdida de hueso que haya. En casos en los que existe una pérdida ósea importante, el proceso se puede alargar hasta unos 6 meses, aproximadamente. Se comienza realizando un diagnóstico completo. Después, se coloca el implante y, tras comprobar la integración del mismo en el hueso, se procede a colocar la corona. En cuanto a los tipos de implantes dentales existentes, aparece una primera clasificación en dos grandes grupos: los implantes osteointegrados y los subperiósticos. En segunda instancia, podrían clasificarse en función de cómo sea su colocación y, por otro lado, por el material empleado.
Tipos de implantes dentales y su clasificación
Gracias a la implantología dental, reemplazar un diente caído es un proceso relativamente sencillo para recuperar la pieza. Se presenta como una solución a nivel estético y funcional. La evolución de los implantes dentales ha llevado a la creación de distintos tipos para dar solución prácticamente a cualquier caso. Siempre son elaborados con materiales biocompatibles con nuestro organismo. Esto garantiza el éxito de este tipo de intervenciones dentales. Veamos la tipología existente.
Implantes endo-óseos u osteointegrados
Su nombre hace referencia a que son implantes colocados quirúrgicamente en el hueso, concretamente, en el maxilar o en el hueso de la mandíbula. Entre todos los tipos de implantes es el más utilizado. Pueden ser cilíndricos, en láminas o, el más empleado actualmente, tornillo roscado. Este tipo se aplica para reemplazar piezas dentales, pero también como alternativa para pacientes que ya llevaran prótesis dentales removibles.
- Implantes dentales con forma de tornillo. Es, quizá, el tipo más utilizado en implantología. El implante tiene forma de tornillo y está fabricado en titanio, que es un metal compatible con nuestro organismo
- Implantes laminados. Este tipo se emplea, generalmente, en casos de pérdida parcial del diente. Aunque lo cierto es que está casi en desuso, se indican habitualmente para personas que presenten poco hueso alveolar, sobre todo, en el maxilar superior
- Los implantes cilíndricos constan de unas minúsculas perforaciones con el fin de que el hueso siga desarrollándose en su interior. Así, nos aseguramos que queda totalmente fijado. Son de los menos utilizados debido a que el proceso es bastante más extenso al tener que esperar a que el hueso se integre paulatinamente
Implantes yuxta-óseos o subperiósticos
Se trata de otro tipo de implante casi en desuso en la actualidad. Principalmente, se venían utilizando hasta ahora cuando se daban casos de una altura ósea mínima, ante la imposibilidad de portar una dentadura convencional. Consiste en una estructura de metal o marco, que se coloca debajo del tejido de las encías. La integración hueso-implante es mucho más lenta, debido a la posición del implante por encima del hueso.
Clasificación de los implantes dentales según su colocación
Uno de los criterios de clasificación para los tipos de implantes dentales es en base a la colocación de esas piezas dentales de reemplazo.
- De carga inmediata. Para pacientes con la cantidad óptima de hueso, se inserta el implante directamente en la encía, por lo que no es necesario abrir la misma. Se debe realizar sin que exista ningún tipo de infección y se coloca el mismo día tanto implante como corona
- All on 4 y all on 6. Aplicado en casos de pérdida total o parcial de los dientes, consiste en colocar un arco completo de 4 o 6 implantes. Esta solución de prótesis dental fija, se realiza el mismo día de la intervención, reduciendo sensiblemente los tiempos del procedimiento. Al ser un tratamiento más corto y no ser necesario un injerto de hueso, influye en el precio del implante, resultando una de las alternativas más económicas
- En dos fases. Son los implantes que constan de dos fases para su colocación completa. En la primera fase se coloca el implante dental y se espera a una osteointegración exitosa que suele ser de entre 3 y 6 meses. En la segunda y última fase, se procede a colocar pilar y corona
Clasificación en base al material empleado
Los materiales empleados, principalmente, son dos: zirconio y titanio. A continuación, pasamos a describir las características de cada uno de ellos. Los implantes de zirconio se integran más eficaz y rápidamente en nuestro organismo. Esto se debe a que este material efectúa una unión química entre hueso e implante, al contrario que ocurre con el titanio. Es más seguro, al evitar la aparición de bacterias sub-gingivales gracias a la durabilidad de este tipo de implante.
Por otra parte, los implantes dentales de titanio, siempre han sido los más utilizados tradicionalmente. Se reconocen por su color parecido al del acero. También es un material biocompatible y extremadamente duro, aunque moldeable. En este caso, la unión es mecánica, y se produce mediante la adhesión al implante de las células del hueso.
A modo de resumen, cabe destacar los diversos beneficios que proporcionan los implantes dentales. Su principal ventaja es su condición de implante permanente, lo que lo convierte en una solución fija frente a la pérdida de piezas dentales. Son muy duraderos, estéticos y seguros. De hecho, la inmensa mayoría de las intervenciones se realizan con éxito.
Como ves, los implantes son una muy buena solución para reemplazar la pérdida de un diente. Además de las ventajas que proporcionan, existen múltiples tipos de implantes dentales adaptados a cada caso. En Dentalkiub, podemos asesorarte sobre cuál es la mejor solución en base a tus necesidades. ¡Contacta con nosotros!